martes, 23 de septiembre de 2008

Contaminación por PCB en los mares y su efecto en las ballenas

Hola a todos, después de un merecido descanso, reanudamos la bloguemanía, para iniciar en esta ocasión un importante tema que tiene que ver con el impacto de la contaminación en los mares por bifenilos policlorados (PCB) en la cadena trófica , misma que inicia con esos organismos pequeños pero de formas tan bellas y diversas como son las diatomeas. Encontré una noticia que no sólo pretende alarmar sino invitarnos a plantear soluciones, es una página de un diario argentino que se llama Diario de Madryn, brevemente les comento que Puerto Madryn es una hermosa ciudad ubicada en la Patagonia, donde entre otros atractivos, existe un santuario natural en el cual es posible el avistamiento de ballenas. Espero sus comentarios para iniciar el debate, la página es la siguiente:
http://www.diariodemadryn.com/vernoti.php?ID=93767

Otra página de interés es la que contiene información del Dr. Roger Payne, quién es una autoridad en el comportamiento de las ballenas a las que ha estudiado desde 1967, además de ser junto a Scott McVay el descubridor del canto de las ballenas jorobadas. Existe buena cantidad de artículos en la red escritos por este investigador, quién se ha mostrado preocupado entre otras cosas por el impacto de la contaminación acustica en los oceános y su efecto en las ballenas.
http://www.wildmusic.org/es/research/payne

¡Que disfruten las lecturas y tengan un buen inicio de semana!

lunes, 1 de septiembre de 2008

Neodarwinismo vs Teoría Simbiogénica de la Evolución

Hola a todos, navegando por la red encontré una página que me llamó la atención, es una página de un edafólogo español llamado Juan José Ibañez, la página se llama Un universo a tus pies, su blog realmente me atrapó ya que en particular el tema de fertilidad de suelos es parte importante de mi tesis de maestría y al parecer el es un experto en ese campo. Dentro de este blog, hay un artículo que resulta interesante ya que plantea las repercusiones de la Teoría de la Endosimbiosis de Lynn Margulis a nivel filosófico y social en oposición al neodarwinismo. Por supuesto esta es una posición personal del autor, pero invita a la reflexión como una necesidad de los estudiosos de las ciencias ambientales en relación a la evolución de los organismos y sus implicaciones éticas, sociales y políticas.

El artículo se llama: Teoría de la Evolución y Sociedad: Neodervinismo vs teoría Simbiogénica de la Evolución; Microsoft vs “Creative commons”. Se encuentra ubicado en los archivos del mes de Febrero de 2007.

La dirección es del blog es: http://weblogs.madrimasd.org/universo/archive/2007/02.aspx

Según Curtis y Barnes (2006), el paso de los procariotas a los primeros eucariotas (los protistas) fue una de las transiciones evolutivas principales solo precedida en orden de importancia por el origen de la vida. La cuestión de cómo ocurrió esta transición es actualmente objeto de viva discusión.

Para complementar disfruten una entretenida entrevista a Lynn Margulis (autora de la Teoría de la Endosimbiósis), sin duda dejará a muchos con la boca abierta ya que sin eufemismos nos hace ver el papel del ser humano en la vida. La entrevista se titula: No somos importantes para la vida...la liga es la siguiente,
http://www.madrimasd.org/informacionidi/noticias/noticia.asp?id=9776

Recuerden que la participación para este post sólo estará abierta del 1º. al 7 de septiembre.


Saludos atentos y buen inicio de semana…
Guadalupe

domingo, 24 de agosto de 2008

Rastrean Origen de la vida


24/AGOSTO/2008

Redacción / Salvador Manjarrez / FOTO: BERNARDO ÁLVAREZ



El Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) de Irapuato, mantiene en sus laboratorios 3 mil microorganismos extraídos de la zona de Cuatro Ciénegas, Coahuila, que ayudarán a revelar la historia de la biología en todas sus ramas.
Después de tres años de estudios y visitas de investigadores a aquella región desértica ubicada en Coahuila, inició el análisis de cada microorganismo.
Desde el año 2005, los investigadores Agustín Martínez Antonio y Luis Herrera Estrella fueron invitados por el Instituto de Ecología de la UNAM a participar en un estudio más a fondo de Cuatro Ciénegas, valle rodeado de montañas sumamente aislado donde existen 400 pozas de agua subterránea de 300 millones de años de antigüedad, donde se desarrolló un mar somero y químicamente esa agua ha tenido cambio y resguardado millones de microorganismos.
La titular del Departamento de Ingeniería Genética del Cinvestav de Irapuato, Gabriela Olmedo Álvarez, quien también participa en el proyecto, informó que estos organismos de la época del Jurásico son analizados para determinar su evolución y adaptación a las nuevas condiciones del agua.
“Estas bacterias son muy interesantes porque son capaces de formar unas estructuras llamadas espera cuerpo, que resisten al calor y pueden estar cientos de años inactivas”, explicó.
Olmedo Álvarez agregó que a partir de los servicios que preste el Laboratorio Nacional de Genómica (Langebio) –también ubicado en Irapuato-, se abre la oportunidad de conocer el genoma de una de estas bacterias.
“Con el análisis de una de estas bacterias, podemos tener ahora una lista completa de toda la información genética, de millones que hay”, expresó.
La idea es crear un grupo multidisciplinario de investigadores del Cinvestav para encontrar una estrategia para clasificar las 3 mil bacterias sin gastar tanto dinero, ni inversión de tiempo.
Las bacterias jurásicas
Los investigadores del Cinvestav de Irapuato ya lograron descifrar el genoma completo de la bacteria Bacilus coahuilensis, una especie nueva que demuestra la adaptación que sufrieron las criaturas cuando se mudaron del océano a Cuatrociénegas.
A partir de este hallazgo se puede saber que la falta de alimento que sufrió la bacteria la obligó a adquirir genes de su entorno, que le permitieron vivir sin fósforo y con mucho sol, al mismo tiempo que perdió muchos de los propios, según detalla un artículo del órgano de difusión científica de la UNAM.
El artículo menciona que lo que sucedió, en términos generales en Cuatrociénegas, fue que el mar se quedó atrapado entre las rocas. Después el agua se fue, pero sobrevivieron sus bacterias, que han resistido 200 millones de años el levantamiento del continente y la desertificación de América.
El Valle de Cuatrociénegas –de donde proceden las bacterias que son investigadas en el Cinvestav- se encuentra a tres horas de Torreón, Coahuila.
Es considerado una reserva ecológica debido a que en él existe flora y fauna únicas, endémicas, como la tortuga bisagra, la tortuga de concha blanda de color blanco, el pez ciego. Está rodeado por seis montañas, cuya altitud rebasa los tres mil metros sobre el nivel del mar.
El color azul de sus aguas se debe a algas microscópicas llamadas estromatolitos, una especie de coral que provee de oxígeno al agua.
Una pista del origen de la vida
La bacteria cuyo genoma fue descifrado por científicos guanajuatenses es una pista para conocer el origen de la vida y de la diversidad biológica en el planeta.
El desciframiento reveló que los microorganismos poseen los genes necesarios para utilizar carbono, nitrógeno, oxígeno, azufre y fósforo, elementos esenciales para la vida.
“El Valle de Cuatro Ciénegas es un laboratorio natural irreemplazable”, dice la investigadora Valeria Souza, del Instituto de Ecología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Estudiar el origen de la vida y de la cadena alimenticia a través de bacterias es posible gracias a que son organismos muy pequeños y abundantes, que además son para los científicos el mejor marcador de movimiento de agua.
“Las bacterias resisten condiciones extremas de presión, calor, frío y sal. Pueden sobrevivir por mucho tiempo en ambientes que resultan imposibles para otros organismos. Además, son las responsables de todos los ciclos de nutrientes del planeta y de que exista oxígeno en la atmósfera”, explica Souza.
La ecóloga detalla que en el Valle de Cuatro Ciénegas “todavía existen las bacterias que hicieron nuestra vida posible”. Se refiere a microorganismos antiguos, llamados cianobacterias. Una de ellas es llamada Calothrix.
“Se trata de la cianobacteria predominante del valle. Es la base de la cadena alimenticia, ya que puede fijar carbono, nitrógeno y fósforo. Calothrix es increíblemente plástica: forma estromatolitos de varias formas, tapetes microbianos, una especie de encaje que mantiene la arena en el desierto y grandes manchas negras en las sierras”, explica.
Además de revelar las condiciones adaptativas para desarrollar y conservar la cadena alimenticia, estas bacterias construyen estromatolitos, que son estructuras sedimentarias porosas, formadas de calcio y producidas por la actividad metabólica de algas y bacterias. Estas estructuras se adhieren a las paredes y suelo de las pozas.
“Su análisis, junto con el desciframiento de las cianobacterias, es un viaje al pasado que nos ayuda a entender la evolución en el planeta”, explica Souza, quien, con apoyo del doctor Luis Herrera Estrella, del Cinvestav, descifró el genoma de Calothrix.
Sobreviviente evolutivo
Las cianobacterias, como Calothrix, han trascendido varias épocas de la evolución en la Tierra. Su estructura es hoy casi idéntica a como era hace 200 millones de años.
Del Jurásico
Estas bacterias datan de la era del Jurásico, que inició hace 200 millones de años. Vivieron dinosaurios y cianobacterias, como Calothrix
Organismos resistentes
Las bacterias resisten condiciones extremas de presión, temperatura y sal. Sobreviven mucho tiempo en ambientes que resultan imposibles para otros organismos. Son responsables de todos los ciclos de nutrientes del planeta y del oxígeno en la atmósfera.

Fuente: http://www.am.com.mx/Nota.aspx?ID=216489&strPlaza=Leon&IDPlaza=1